Asociación para la defensa de la sanidad pública

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El Plan Director del Hospital Universitario de Salamanca es la gran apuesta de la sanidad de nuestra provincia para el Siglo XXI. Conscientes de ello, desde la ADSP queremos abrir un foro de debate a través de esta página web, abierto a todos los profesionales sanitarios y a toda la sociedad, sobre este tema.

Desde la ADSP pensamos que es la hora de sumar voluntades y cumplir compromisos. Los nuestros son hacer un seguimiento crítico de la evolución del proyecto. En este momento nos pronunciamos para pedir:

1.- El cumplimiento de los plazos de construcción

2.- Ya que las obras van a traer consigo numerosos inconvenientes para los profesionales y sobre todo para los usuarios, será necesario que unos y otros se carguen de paciencia y solidaridad; pero también será necesario que las autoridades responsables hagan una cuidada planificación de cada movimiento, para que estos inconvenientes no se conviertan en sufrimientos o conflictos de incalculable gravedad.

3.- El plan funcional del hospital nace ya viejo, el primero es de 2001 y los retoques posteriores no dejarán de estar obsoletos cuando la obra finalice. Los cambios en la asistencia sanitaria van muy deprisa y mucho más los cambios en la sociedad. Hay que hacer previsiones de futuro y para ello es preciso contar desde ya con los representantes de los usuarios y con los profesionales del hospital y no limitar esta última opción a las jefaturas de servicio o a los supervisores de enfermería. Un hospital con proyección de futuro tiene que contemplar la ubicación no solo de las estructuras clásicas (camas, consultas, quirófanos, urgencias o cuidados intensivos) sino también de nuevas unidades más dinámicas y complejas y más abiertas a la sociedad y a los otros niveles asistenciales (atención primaria y atención sociosanitaria). Además un hospital para este siglo debe contemplar como una norma básica la seguridad y el confort de los pacientes. Por fin, no debemos olvidar que se trata de un hospital universitario con incontestable vocación docente y que será necesario planificar su estructura para que dentro de su espacio pueda ofrecerse la formación de los profesionales de la sanidad (médicos, enfermeras, fisioterapeutas, farmacéuticos…), tal y como los nuevos tiempos están reclamando.
El reto es grande y todos tenemos que estar a la altura.

El Plan Director del Hospital se presentó por vez primera hace ahora 8 años, como un proyecto de reforma en profundidad del Hospital Universitario de Salamanca. Aún existía el INSALUD y no estaba transferida la Sanidad a la Junta de Castilla y León. Pasaron 6 años hasta la licitación de las obras, que por fin hemos visto iniciadas. El proyecto actual es en realidad la construcción de un nuevo Complejo Hospitalario en la zona donde ahora están ubicados los hospitales. En los últimos meses se ha abierto un interesante debate sobre la conveniencia o no de hacer estas obras en el lugar indicado, con todos los inconvenientes que tiene la zona en sí (limitada y próxima al río) y la coincidencia de obras de gran calado con la asistencia sanitaria durante un largo periodo de tiempo. Algunos proponían haber hecho el nuevo hospital en otro emplazamiento. El problema es que este debate ha sido tardío y cuando ya se habían recorrido múltiples trabas administrativas para el comienzo de las obras. Pensar otra ubicación hubiera retrasado el proyecto más años o quizás habría enterrado la propuesta. Por ello pensamos que este debate debe dejarse atrás y centrarnos en lo que viene.

Un nuevo hospital en Salamanca es una necesidad y una oportunidad. Es una necesidad porque el hospital actual se ha quedado obsoleto en su estructura y en su función y es una oportunidad para los profesionales sanitarios y sobre todo para los ciudadanos salmantinos, de tener una estructura sanitaria especializada más moderna, más accesible y más cómoda.

El nuevo hospital es además una obra grandiosa, en su tamaño y en su coste (casi 200 millones de euros) y cuenta con un interesante diseño arquitectónico. Su construcción se hará en fases y ya se ha iniciado la primera, la construcción de los edificios industriales en la zona más próxima al río. A continuación se construirá un parking de más de 500 plazas y por fin, se iniciarán las obras de los edificios sanitarios. A partir de ese momento se irán trasladando actividades a los nuevos edificios y se irá desmontando la estructura actual.

 

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