Comunicado de prensa de la Comisión de Sanidad de PODEMOS-SALAMANCA ante la pérdida de profesionales en la Plantilla Orgánica del Complejo Asistencial de Salamanca.
En estos últimos años, los ciudadanos hemos soportado una política de recortes que han afectado a los pilares del estado de bienestar, deteriorando nuestra forma de vida hasta unos límites que para muchos rozan la desesperación. Nuestra comunidad de Castilla y León no se ha librado de las políticas de austeridad impuestas y la sanidad ha sido su punta de lanza.
Los ciudadanos, PODEMOS, vemos con estupor, que nos dan cita para el especialista con una demora de seis meses, para una resonancia magnética un año de espera y para el oftalmólogo hasta dos años, mientras se pierden 19 especialistas médicos en la plantilla orgánica del Hospital de Salamanca.
Los ciudadanos, PODEMOS, no comprendemos como se pueden perder en nuestro Hospital 45 enfermeras, mientras vemos y es público en los medios de comunicación, la sobrecarga de trabajo de los profesionales que nos cuidan, los turnos interminables de hasta catorce horas de trabajo, la falta de sustituciones, el cierre de plantas y camas por escasez de personal contratado.
Y una pérdida en la plantilla de otros profesionales, que en conjunto, atentan contra la calidad de un servicio público importante para las personas.
Mientras tanto se derrocha nuestro dinero en cambiar las impresoras del SACYL, aunque funcionen, con un contrato con el Corte Inglés por valor de 10.399.698,32 euros ( casi 2000 millones de las antiguas pesetas),se privatizan servicios que salen más caros que prestándolos el propio hospital, se contratan procedimientos quirúrgicos por valor de un millón de euros con clínicas privadas, resonancias magnéticas por 300.000 euros o el mantenimiento de equipos por 400.000 euros.
Nosotros, PODEMOS, los ciudadanos, vemos este ataque premeditado de los responsables políticos a la sanidad pública, como un intento más de destruir lo de todos. Cuando se permite perder plantilla en un Hospital como el de Salamanca, se disminuye la calidad de los servicios que se prestan y los que salimos perdiendo somos nosotros, los de siempre, los ciudadanos de Salamanca.