Asociación para la defensa de la sanidad pública

¡ASÓCIATE! rellenando este formulario o llamando al teléfono: 913339087

Síguenos en:

Síguenos en:

Asociación para la defensa de la sanidad pública

¡ASÓCIATE! rellenando este formulario o llamando al teléfono: 913339087

Por lo visto, las pasadas fiestas salmantinas, han sido las de mayor participación en muchos años, fundamentalmente debido a la feria de día o como popularmente se conoce ya como “el botellón de Lanzarote”. Económicamente seguro que ha sido un éxito para algunos y a la hora de hacer balance, hemos hablado de las buenas perspectivas para próximos años con la incorporación de nuevas zonas a la movida. Pero si se analiza fríamente empiezan a surgir preguntas y es triste comprobar que entre los parámetros que se utilizan para evaluar el éxito de la feria figuren el número de consumiciones por caseta y día, o los euros gastados en bebida, ah y pincho, y no por ejemplo la calidad de los espectáculos públicos. Comprobar que el gran ambiente es debido a los efluvios que se respiran alrededor de las casetas me rebela.
Durante esas fechas se permite todo, hasta el mal ejemplo. Me pregunto yo ¿donde está el deber de los ayuntamientos en cuidar la salud de los ciudadanos?, no olvide señor alcalde que beber en exceso es perjudicial, es un hábito nocivo que conlleva a una adicción o sea una enfermedad. Para colmo se anuncia para fechas próximas la gran fiesta de la cerveza, le han cogido ustedes gustillo al asunto, pues no creo que el interés sea porque la tradición de la ciudad lo pida, al margen de los intereses que tengan, deben dejarse aconsejar por sus técnicos que seguro que le acotarían sobre las conveniencias de este tipo de celebraciones para elevar el animo ciudadano. Dos cuestiones más: Con qué autoridad moral usted y su ayuntamiento pretende oponerse a los botellones universitarios, ese celo policial de vigilancia y cumplimiento de la ley no lo he visto en la calle en estos días festivos.
Y una invitación a usted y a los concejales de festejos, a que se pasen por las asociaciones de alcohólicos para que les enseñen a divertirse sin el liquido euforizante.

 

Antonio Julián.

Pubicado en «El Adelanto», 23 septiembre 2006

Compartir en email
Compartir en facebook
Compartir en twitter
Compartir en linkedin
Compartir en pinterest
Compartir en whatsapp